Te proponemos un pequeño ejercicio: ¿Cuántas marcas crees que existen en el mundo y, en contraste, cuántas crees que tienes en tu cabeza o resultan relevantes para ti? De todas las que puedas enumerar, ¿cuántas te han enamorado de verdad? ¿Con cuántas te sientes identificado? ¿Cuáles harían de este mundo un lugar un poquito peor si dejaran de existir? En plena era de Internet y de la globalización más absoluta de la información y del comercio, lograr que una marca destaque por encima de las demás es una tarea altamente complicada y, aunque ello hace que las cosas se pongan especialmente interesantes para los diseñadores y creativos –y nos hace disfrutar de verdaderas obras de arte del branding, la realidad es que una marca, por sí sola, no es suficiente: branding e Inbound Marketing son conceptos que, a día de hoy, deben ir de la mano para que tu empresa destaque sobre las demás.
Te contamos por qué.
Branding e Inbound Marketing: ¿Por qué deben ir unidos?
Cuando hablamos de branding normalmente nos viene a la cabeza un nombre, un logotipo y el desarrollo de la imagen corporativa de un negocio. En realidad, la creación de una marca va mucho más allá. Se trata de dar luz a un concepto y definirlo con mimo con todos los elementos de que disponemos: la imagen, la palabra, el sonido, el tacto… Si logramos dar forma al espíritu de ese concepto y definir su esencia, su filosofía, su por qué, su diferencia… habremos superado el primer escalón hacia el éxito. Es más, no alcanzar esta meta u obtener un resultado agridulce o contradictorio podría dar a entender que la idea de negocio es igual de inmadura.
Al contrario, si damos con la clave y definimos una marca homogénea y ‘redonda’, nos será más sencillo encontrar su lugar en el mundo y en el mercado, y es en este punto en el que entra en juego el Inbound Marketing.
Hoy en día, tu marca es –también- lo que la gente dice de tu negocio: la experiencia que ofrece al usuario es lo que la convierte en una marca especial
El papel del Inbound Marketing en este sentido consiste en ayudar a dar movimiento y salida a lo que antes hemos definido a través del branding: consiste en atraer clientes a través de un seguimiento de aquellos usuarios que ‘coqueteen’ con la empresa visitando su web, leyendo su blog o siguiendo sus redes, trabajando para ganar su confianza. También en cuidar la relación con el cliente ganado y premiar su fidelidad, ofreciéndole una experiencia cuidada y personalizada.
Hacia la “era humana” del marketing
¿Por qué esta integración entre branding e Inbound Marketing es más necesaria que nunca? Por muchos motivos –y cada vez más-. Por ejemplo, por el empoderamiento del consumidor, por la proliferación de nuevos canales de contacto, o por la exigencia cada vez mayor de personalizar los mensajes y las experiencias –incluso los propios productos- para captar de verdad la atención del cliente.
También porque la competencia es cada vez mayor y porque el cliente es cada vez más exigente y más crítico –y porque sus críticas y alabanzas se vierten en múltiples plataformas y pueden elevar o destruir un negocio-. Hoy en día, tu marca es –también- lo que la gente dice de tu negocio. Apple no sería Apple si solo fuera una manzana. Es, entre otras cosas, la experiencia que ofrece al usuario lo que la convierte en una marca especial.
En plena “era humana” del marketing, la personalización de la experiencia del cliente a través del Inbound Marketing se convierte en un elemento indispensable
En este contexto, la globalización hace que una empresa situada en la otra punta del mundo pueda convertirse en un palo en la rueda para nuestro crecimiento, y también que cualquier persona pueda dejar su huella –para bien y para mal- en nuestra imagen a golpe de click.
Más allá de ello, la realidad es que lo consumidores reivindican su papel de personas: pedimos marcas humanas que nos aporten algo especial. Los estudios confirman esta tendencia: las marcas de éxito son marcas que hacen sentir y que apelan al tú a tú. Según el reciente informe Human Index Study, las marcas que mejor puntúan son también las que mejor performance financiero tienen, con un 50% más de creación de valor. Tanto es así que se empieza a hablar de la “era humana” del marketing.
Los eventos ocurridos el sábado tuvieron consecuencias inesperadas. pic.twitter.com/zu6Jerhvie
— Netflix España (@NetflixES) 4 de octubre de 2016
Por eso, la personalización de la experiencia del cliente a través del Inbound Marketing se convierte en un elemento indispensable. De poco servirá una marca que atienda a todas las tendencias que vienen y que se acerque de forma distinta al consumidor si no cuentas con una estrategia para acercarla a éste. Una estrategia que debe estar a la altura de una marca bien trabajada, que cumpla con lo prometido y que logre así la meta clave: la confianza del cliente.
¿Necesitas un plan de Inbound Marketing para impulsar tu negocio? ¿Buscas rediseñar o crear tu imagen corporativa?
{{cta(‘2a07d407-2aef-4b6b-be7c-979da10d9201’)}}